
El liderazgo adaptativo y la gestión del cambio
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El liderazgo adaptativo y la gestión del cambio

Jackson F. Ríos Escobedo
Por lo general el liderazgo en las organizaciones se define como el conjunto de habilidades gerenciales que una persona tiene para influir en la forma de ser o actuar de un grupo de individuos determinado, logrando que trabajen con entusiasmo para alcanzar objetivos comunes. Si esta es la definición de liderazgo, entonces ¿qué es el liderazgo adaptativo? Según PhD. Ronald Heifetz, profesor de la Universidad de Harvard, quien desarrollo esta teoría, el liderazgo adaptativo es un modelo de liderazgo práctico que ayuda a los individuos y organizaciones a adaptarse y prosperar en ambientes desafiantes; asumiendo de manera individual y colectiva un proceso de cambio gradual pero significativo.
El concepto central del liderazgo adaptativo señala que hay 2 tipos de problemas o desafíos, los técnicos y los adaptativos; y que el mayor problema de los líderes es no saber reconocer la diferencia entre ellos. Respecto a los problemas o desafíos técnicos, uno puede identificarlos porque existe una solución conocida para resolverlos; por ejemplo, si una persona tiene un problema cardiaco y necesita una cirugía para abrir sus arterias, es posible recurrir a un cirujano experto para que realice la operación y pueda solucionar el problema. Por otro lado, en lo referente a los problemas adaptativos, es posible reconocerlos porque son más complejos, no pueden ser resueltos directamente por un experto, estos problemas requieren de un proceso de ensayo y error, experimentación, nuevos conocimientos, tiempo y asimilación. Continuando con el ejemplo del paciente con un problema cardiaco, el problema técnico del paciente se solucionó con la cirugía, gracias a la intervención de un experto; pero el problema adaptativo para el paciente será encontrar la manera de cambiar su propio estilo de vida después de la cirugía; deberá dejar de fumar, beber, comer cosas que tal vez no le agradaban mucho, etc. Además, también su familia y amigos se verán afectados por estos cambios. Estadísticas señalan que sólo el 20% de las personas que tuvieron un problema cardiaco se adaptan a un nuevo estilo de vida.
La necesidad de encontrar una solución a los desafíos adaptativos, o situaciones que mezclan ambos tipos de problemas, es lo que genera la necesidad del liderazgo adaptativo. En las personas, este tipo de problemas conllevan un proceso de cambio, de aprendizaje; el cual es imposible realizar de manera rápida y sin experimentar tensión. Y la tensión en este sentido es la fuerza interna que moviliza a una persona a cambiar, a aprender, y que no implica nada negativo, salvo cuando sobrepasa los límites de tensión de una persona y empieza a generarle stress. Por otro lado, la tensión que genera todo problema adaptativo no se debe a que las personas se resistan al cambio, más bien, esta corresponde a que las personas se resisten a las pérdidas que son implícitas a todo desafío adaptativo; las cuales no necesariamente son materiales, si no, muchas veces son emocionales y afectivas.
Este concepto de tensión generado por los problemas adaptativos puede extenderse a grupos humanos. Mientras que este tipo de problemas genera tensión en las personas, en los grupos humanos genera facciones. Estas facciones son grupos de personas que se juntan a partir de un problema común y que comparten valores, supuestos, paradigmas, intereses, etc. En este sentido, bastan dos personas para que se generen facciones, cada una defendiendo su posición respecto a un problema. Por otro lado, al analizar los grupos humanos desde este punto de vista, es necesario tener una visión sistémica de la realidad, saber que cada persona, de acuerdo a una situación específica, pertenece a una facción y que ésta facción pertenece a un sistema donde se pueden encontrar diferentes facciones, cada una con sus propios intereses comunes.
Las facciones se generan a partir del desafío adaptativo que enfrentamos, por ejemplo el controvertido tema del matrimonio homosexual, existen facciones a favor, en contra, y otra facción que no tiene una posición definida al respecto. Algo similar ocurre en las organizaciones, cuando existen problemas entre las diferentes áreas funcionales, como la de recursos humanos y finanzas, las cuales tienen como objetivo común la sostenibilidad en el largo plazo de la organización, sin embargo tienen objetivos particulares diferentes.
El diagnóstico de un problema adaptativo se basa en la observación del problema y la interpretación de la información obtenida para definir una estrategia. La observación debe ser llevada a cabo objetivamente con una mirada sistémica, panorámica, que nos permita precisar claramente cuál es el desafío adaptativo (para esto se necesita una buena capacidad de abstracción); asimismo, reconocer y hacer un mapeo de las facciones que se han formado y analizar cada una de ellas detalladamente, determinar sus valores, intereses, supuestos, paradigmas y posibles pérdidas ante un cambio, además de identificar quienes son sus autoridades formales e informales y la lealtad hacia ellos. Una vez obtenida esta información, se procede a interpretarla; concretamente a buscar aspectos comunes entre las diversas facciones con el objetivo de hallar un “idioma común” entre todas ellas, en otras palabras, un objetivo que todas las facciones del sistema están interesadas en alcanzar.
Es en este punto, una vez hallado el objetivo común que movilice todo el sistema, cuando se necesita el ejercicio de liderazgo adaptativo para llevar a cabo acciones que generen puentes y alianzas que involucren a las diferentes facciones. En este sentido, el ejercicio de liderazgo no se trata de movilizar a la facción que perteneces, es movilizar a otras facciones, a todo el sistema en busca de la mejor solución para el problema.
Las personas que toman decisiones en las organizaciones, al no estar familiarizados con estos conceptos, típicamente buscan dar soluciones técnicas a los problemas adaptativos y fracasan rotundamente. Ese es el objetivo de liderazgo adaptativo, analizar una situación y si se encuentra un problema adaptativo, no darle una solución técnica, más bien, diagnosticar la situación con una visión sistémica y ejercer el liderazgo necesario para darle una solución adaptativa.
Escrito por: Lic. Jackson F. Ríos Escobedo
Licenciado en Administración de Negocios de la Universidad Católica San Pablo. Arequipa, Perú.
Licenciado en Economía de la Universidad Nacional de San Agustín. Arequipa, Perú.
Diplomado de Liderazgo y Dirección de Equipos, Class of 2013-2