San Pablo   Informa
San Pablo   Informa

San Pablo Informa

Y de pronto, dejamos de correr

 

Por: Claudia Mabel Calisaya Carpio, profesora del Departamento de Humanidades de la Universidad Católica San Pablo. Entrenadora del talento personal y de equipos de alto rendimiento certificada y coach certificada, miembro de ALC Coaching.

Y de pronto, dejé de correr. Antes corría para ir a trabajar, luego del trabajo salía a seguir laborando o incluso corría para llevar una capacitación adicional; y a  mi  alrededor  todos  corrían  para  hacer posiblemente lo mismo o más. Acabamos de cumplir un año desde que todo se detuvo, y de seguro en algún momento desde ese instante nos hemos preguntado: ¿ahora?, ¿qué hago? Si lo único que hacía era “correr”.

Los invito a pensar y a ver más allá, ¿por qué correr? ¿A qué se debe que lo queremos hacer? Los invito incluso a  explorar  y a  pensarlo aún más respondiendo a la siguiente pregunta: ¿realmente de qué corremos? En realidad, no solo “corremos” para el hacer, sino también para dejar de pensar, pues nos hemos entrenado  para  hacer  muchas  cosas,  para  llenar  nuestra mente  de varias ocupaciones con el  fin  de  no  llegar  a “ese  momento”;  al  cual  varios le tememos y no queremos enfrentar. ¿Momento al cual varios le tememos y no queremos enfrentar? ¡Así es!, y ¿Cuál es ese momento? Pues,  es  el tiempo  a  solas,  ese  tiempo auténtico y  especial donde podemos permitirnos “vernos” a nosotros mismos frente  a  un  espejo  para hablarnos,  para  preguntarnos y respondernos sobre el cómo nos sentimos o sobre lo que nos está pasando, para mirarnos con amor  y desde el amor, para reír o llorar; para simplemente sentir, ser y dejar de hacer.

Ese momento de estar con uno mismo es el  regalo perfecto, porque lo podemos elegir, porque podemos decidir cuándo y cómo dárnoslo y porque es una real demostración de amor. Creo firmemente que “solo damos lo que somos”, entonces ¡Imaginen lo que sucederá en nuestro alrededor si nos demostramos amor!, pues será sorprendente lo que sucedería porque solo daremos y obviamente recibiremos amor de los demás. Esto es lo que realmente  nos  hace humanos: “Nosotros y lo  que nos rodea  merecemos  amor, y es el amor la auténtica medicina.”

Dentro de todo lo que descubriremos, una vez que elijamos regalarnos y aceptar solo amor por y para uno mismo, será el poder reconocer que  el  tiempo  es  completo  y  perfecto,  y que  no  hay  por  qué  tener miedo. Este puede ser el mejor resultado de dejar de “correr”.

 

Etiquetas

Este sitio web almacena cookies en tu PC, las cuales se utilizan para recopilar información acerca de tu interacción con nuestro sitio web y nos permite recordarte. Usamos esta información con el fin de mejorar y personalizar tu experiencia de navegación y para generar analíticas y métricas acerca de nuestros visitantes en este sitio web y otros medios de comunicación. Para conocer más acerca de las cookies, consulta nuestra política de privacidad y cookies.